Los genes maníacos se han preparado para explotar, todos los pelos de punta son un homenaje al Street Fighter. Gira el acelerador e irrumpe en un mundo de libertad. Siente el latido salvaje del corazón y la resonancia atronadora del motor. La potencia máxima sale disparada y la aceleración violenta corta el ritmo. Ahora te toca a ti subir al escenario.